El fichaje inesperado del Valencia en invierno

El Valencia ha cerrado un fichaje inesperado en invierno, y se llama Kevin Gameiro. Lleva un 2019 en el que está siendo decisivo hasta límites que nadie podía imaginar, con números a todos los niveles muy superiores a los seis primeros meses de campeonato. Y es que desde que empezó el año y no se concretó su marcha del equipo (aunque el club lo intentó casi hasta el final del mercado), Gameiro ha marcado dos goles, en Gijón en Copa (clave), y en Barcelona en Liga, una gran definición a pase de Rodrigo, y ha dado asistencias que han significado oro puro. El gol de Rodrigo en Vigo que supuso la victoria. De nuevo a Rodrigo el día del Getafe para pasar la eliminatoria, y contra el Betis para que Denis Cheryshev lograra el 2-1 en el Benito Villamarín. Todos esos momentos claves y vitales para los de Marcelino García Toral.

Un grave problema del Valencia llamado Kevin Gameiro https://t.co/r4e0612GJ6

— locos por el fútbol (@locosvcf) 24 de enero de 2019

Que diera un paso adelante era algo que el cuerpo técnico le estaba poniendo a gritos, porque era una apuesta casi personal del técnico asturiano. Que ahora esté como está es música celestial, y aunque las críticas han sido justas porque se las ha ganado, que ahora esté disfrutando de este momento también es para alegrarse. Cualquiera que hubiera marcado el 2-2 hubiera sido bienvenido, pero que lo hiciera él puede ser también una especie de señal positiva de cara al futuro, que hace mucha falta.