El Valencia CF gana adeptos en las américas

Rolando se enamoró del Valencia CF con tan sólo catorce años. Hoy por hoy se siente como un valencianista más emocionándose cuando entra en Mestalla

José Luis González | 28 MAR. 2016 | 12:22

Según nos cuenta el Valencia CF en su página oficial, Rolando se enamoró del Valencia CF viendo un encuentro en el que se enfrentaba al FC Barcelona. En aquel partido, el gran "guaje" Villa anotó un bonito tanto que hizo que el joven americano se quedase prendado de los colores y el sentimiento del equipo valenciano. Llegando a sentirse, a día de hoy, un valencianista más.

En la pasada gira de pretemporada el Valencia CF visitó Estados Unidos, para realizar una serie de encuentros. En el primer encuentro se enfrentaron al Columbus Crew, y Rolando no dudó en hacer 16 pesadas horas de coche para poder ver a su equipo en persona por primera vez. Negredo sería el artífice del único tanto del encuentro, dando la victoria al combinado visitante para alegría de los aficionados que acudieron a las gradas del MAPFRE Stadium, entre los que se encontraba Rolando. Este texano de veinticuatro años ha hecho su sueño realidad, gracias al Valencia CF, que le ha brindado la oportunidad de conocer Mestalla, la ciudad de Valencia y toda la cultura valenciana, además de poder acudir al estadio para poder disfrutar de un encuentro de su equipo favorito. Diez años después de ver ese partido ante el FC Barcelona, Rolando se emocionó al ver el estadio a sus pies, en el Tour de Mestalla, observando la majestuosidad de ese coliseo en el que tantas estrellas del mundo del fútbol han desplegado su calidad.

Es muy bonito como el mundo del fútbol puede atraer a gente de diferentes partes del planeta y mucho más conseguir que personas situadas a miles de kilómetros de una ciudad, de continentes lejanos, puedan llegar a enamorarse y quedarse prendados por un club, por un escudo, de un equipo valenciano. Pero todavía es mucho más emotivo que a estas personas se les brinde la oportunidad de poder vivir la emoción en primera persona, sentado en las gradas de la tribuna de un casi centenario estadio, para poder animar a su equipo.