Con un PAR, con R de Roig

Juan y Fernando Roig, Valencia Basket y Villarreal CF, valencianos y mecenas, una especie que existe, aunque muchos no lo crean

Toni Hernández | 14 ENE. 2016 | 12:03

De entrada voy a declarar mi cariño y admiración por la familia Roig, por toda ella, por Paco, Juan, Fernando y Trini, y por sus hijos, muchos de los cuales son amigos desde hace casi 25 años en algunos casos. No, no soy imparcial, por eso quiero dejarlo claro antes de seguir escribiendo, y sabiendo que aunque lo haga, habrá gente que no lo entienda o no lo quiera entender. Aunque también confieso, me da igual, yo soy libre para pensar.


Los Roig, de largo, son la familia valenciana que más ha invertido en el deporte de nuestra comunidad a fondo perdido de la historia, DE LA HISTORIA. De su bolsillo, de su dinero, sin más. Peleando durante años por una Ley de Mecenazgo que sea justa con los que invierten, pero que nunca llega. Llevándose palos deportivos, de esos que duelen en el orgullo, pero levantándose como ganadores natos, porque eso es lo que son: ganadores, y además, infatigables.


Hace años, muchos, tantos como que casi era el siglo pasado, Juan y Fernando apostaron por el Valencia, más aún de lo que lo habían hecho en los tiempos de Paco como presidente. Porque ellos, no nos olvidemos, eran los que velaban por este club. Pero como en Valencia somos como somos, pancartas en la sede del club contra Mercadona, unos visionarios los que las pusieron unos imbéciles los que las pagaron, una campaña mediática vergonzosa “¿qué quieren los Roig?”, y discretamente, sin hacer ruido porque no es el estilo, decidieron plegar velas. Quizá ese sea un error histórico, jamás subsanable.

Un buen amigo, poco después, me hacía una reflexión. “Toni, si Fernando Roig ha sido capaz de traer a Palermo al Villarreal (aunque no triunfó, en ese momento era uno de los delanteros más cotizados del mundo), ¿a quién habría traído para el Valencia?”. La pregunta era demoledora, y la respuesta ciencia ficción. Pero recuerdo aquella frase como si fuera hoy.

[video:https://www.youtube.com/watch?v=eABvx69RVX8]

Todo me ha venido a la cabeza volviendo a escuchar la rueda de prensa de Suso García Pitarch de ayer. Dejó un recado, bastante directo, diciendo algo así como “ningún empresario valenciano había apostado como Peter Lim por el club”. Y la frase es tan verdad como que a la familia Roig no le dejaron hacerlo hace casi 20 años.

El Villarreal quizá sea enemigo deportivo del Valencia, incluso le ha llegado a superar en ocasiones. El Villarreal es Fernando Roig, con su plan, con su dinero, con su exigencia, con Fernando hijo, con Llaneza. Un club que cuando lo conoces por dentro es una delicia, una pasada. ¿Que por hablar bien de ellos alguien se enfada? Pues dos faenas tiene, porque eso que hay que en Villareal, en parte, está porque a Fernando lo echamos de aquí. Si, lo echamos, que la memoria no sea tan corta, y las mentes más cortas aún.

[video:https://www.youtube.com/watch?v=MHvKm5Lbckw]

¿Hablamos de Juan Roig? ¿A estas alturas hace falta hablar de Juan Roig? Uno de los empresarios más importantes del mundo, que cuida a su ciudad como si fuera su familia, que paga de su bolsillo el mejor baloncesto profesional del mundo fuera de la NBA. ¿Tampoco recordamos que a Juan no se le dejó entrar en el Valencia? ¿También se nos ha olvidado? Ahora todo son alabanzas para el equipo que gana y gana. Que lo paga él, no nos olvidemos. ¿Y quién cuida a la Fuente de San Luis, quién la pone bonita como está?

[video:https://www.youtube.com/watch?v=vZpXsXCQqSc]

Acabo como empecé, “con un par, con R de Roig”. Que eso es lo que echan para sacar sus proyectos deportivos adelante, además de mucho dinero. Aprendamos de los errores del pasado para no repartirlos en el futuro. Mi respeto más absoluto a la labor de esta familia.