El juego, la gran asignatura pendiente de Nuno

La victoria del Valencia CF ante el Getafe en Mestalla no debería tapar las carencias que se vieron en cuanto al juego del equipo blanquinegro

Nacho Ballester | 16 FEB. 2015 | 09:00

La victoria por la mínima del Valencia CF ante el Getafe tapó considerablemente el mal juego que desplegó el equipo durante buena parte del encuentro. Es evidente que una victoria es lo que se busca siempre y hay mil maneras de conseguirla, pero lo que se vio ayer en Mestalla está muy lejos de lo que debe ser un equipo que pelea por los puestos de Liga de Campeones. Para no ser ventajista, creo que lo mejor es contar las cosas cuando se pierde, pero también cuando se gana. El equipo estuvo sufriendo ayer de lo lindo ante un equipo que fuera de casa no ha ganado desde Octubre. El Getafe de Quique encerró al Valencia en Mestalla en una situación que no es nueva este 2015, ya que también pasó con el Almería.

En Mestalla no te pueden encerrar los equipos más humildes de la liga BBVA, con todo el respeto para ellos. Los últimos diez minutos de partido sirvieron para demostrar que el equipo no tiene capacidad para mantener la posesión cuando el rival le aprieta considerablemente. El balón no le duraba al Valencia ni para conectar tres pases y salir a la contra. Para no mentir, comentar que pudieron cerrar el partido con las dos que falla Rodrigo Moreno, pero también pudo empatar el Getafe en una jugada clarísima que no llegaron a rematar por poco ninguno de sus dos atacantes. Nuno en la rueda de prensa posterior: "No me voy a casa con la última jugada en la que pudo empatar el Getafe, sino que lo hago con la posesión y la calidad que demostramos". A esto me refiero cuando digo que no se hace autocrítica suficiente.

Todos queremos estar en la Champions y por ello considero fundamental que el técnico haga autocrítica y valore y destaque tanto los aciertos como los errores, porque sino se seguirán haciendo. Nuno lleva dos partidos ganados en los que ha tenido que cambiar el sistema en mitad del partido para lograrlo. El 4-4-2 con Parejo en la banda derecha es el peor sistema para que se luzca el de Coslada y además es el sistema que más lo castiga físicamente porque tiene que bajar en cada jugada a tapar la banda.

En Cornellà el equipo no funcionó hasta que se lesionó Alcácer y Nuno pasó al 4-3-3 con las alas abiertas que tantos éxitos le están dando al Valencia. El domingo, ante el Getafe, ocurrió lo mismo. El equipo solamente generaba peligro con Jose Luis Gayà y Pablo Piatti por el carril izquierdo. La banda derecha estaba muerta y Rodrigo de Paul no estuvo del acertado desde la mediapunta. El equipo marcó de penalti cuando Feghouli ya se preparaba para saltar al césped de Mestalla. El esquema volvió a cambiar a 4-3-3 y el equipo se tiró inexplicablemente atrás con un miedo que no le pega nada. Como digo, se pudo matar el partido gracias a un Feghouli espectacular que se dedicó a regalar asistencias que no eran aprovechadas por sus compañeros.

Ahora el Valencia de Nuno tendrá que volver a demostrar ante el Córdoba que lo de Cornella no fue un espejismo y que el equipo sabe rendir fuera de casa. Esperemos que Nuno Espirito Santo haya aprendido la lección en estos dos últimos partidos pese al resultado victorioso. Lo dicho, que las victorias no tapen las carencias.