Empate con sabor a fútbol en el Nuevo San Mamés (1-1)

El Valencia fue mejor pero el cansacio pudo con los de Djukic

Dani Meroño | 06 OCT. 2013 | 23:47

El Valencia CF no pudo pasar del empate en su primera visita al Nuevo San Mamés. Un resultado igualado en el marcador pero no sobre el terreno de juego, donde los pupilos de Miroslav Djukic desarrollaron el mejor fútbol de toda la temporada pero no obtuvieron el premio de la victoria a pesar de las ocasiones generadas.

Y es que en los estrenos del Valencia CF en campos españoles, los empates habían sido una tónica tanto sus primeros duelos en Chamartín (1948); Camp Nou (1958)y Manzanares (1966). Con un equipo de circunstancias y con novedades como la de Paco Alcácer en punta de ataque o el reconocido premio a Feghouli tras el gol en Krasnodar, el conjunto valencianista planteó un partido serio y aguerrido, donde tuvo la posesión del balón y el dominio en lo que a ocasiones se refiere.

No en vano en la primera parte, fueron Jonas y Feghouli los hombres que más inquietaron a un Iraizoz que tuvo que emplearse a fondo para que la lata no se abriera. Algo que no pudo impedir tras el claro penalty a Feghouli que el argentino Ever Banega se iba a encargar de materializar tras una ejecución impecable. Era el 0-1 y el Valencia lo tenía todo de cara para llevarse el partido.

Habiendo perdonado varias ocasiones, el Valencia se fue al descanso con el amargo sabor de no haber podido ampliar la renta goleadora, algo que acabaría pagando. Buena prueba de ello fue la segunda parte, con un Athletic más asentado y mucho más incisivo, se sucedieron las ocasiones rojiblancas ante un Valencia que empezaba a mostrar síntomas de cansancio.

Solo un globo errado de Barragán puso en aprietos a Iraizoz, que salvo otra ocasión de Jonas tras un disparo se convirtió en un mero espectador del partido los últimos quince minutos. Un final de encuentro donde el Athletic Club asedió la portería valencianista con ocasiones como la Muniain al palo y, en uno de esos balones colgados, llegaría el empate. Un mal ajuste defensivo hacía que el equipo de Valverde igualara mediante un gol de Mikel Rico. El partido iba a ser un suplicio para el Valencia. Guaita se tuvo que emplear a fondo para evitar que el equipo de Valverde tirara de épica y remontara un partido que parecía predestinado para el conjunto valencianista.

A la postre empate con sabor a fútbol ya que el Valencia desplegó un buen juego durante 75 minutos, justo lo que duró la gasolina de los futbolistas de Miroslav Djukic.