Polémica derrota del Elche ante el Real Madrid

Increíble derrota del Elche frente a un Real Madrid que si ganó en la noche de hoy no fue precisamente por sus futbolistas, es más, podríamos resaltar lamentablemente al colegiado Muñíz Fernández como el hombre del partido; el porqué se relata solo con ver el resumen.

Partidazo por parte del Elche, que valentía la del equipo de Fran Escribá que jugó de tú a tú, como lo hizo la temporada pasada en segunda. Equilibrado el partido durante los primeros treinta minutos. Los locales tuvieron su ocasión con un remate de Lombán en una falta lateral, que Diego López se encargó de parar magistralmente. Al igual que el Madrid que a través de Isco y Cristiano Ronaldo ponían en apuros constantes al meta Manu Herrera.

Pero tras ese equilibrio de poderes entre ambas escuadras llegó la primera de las tres polémicas de la noche. El Martínez Valero en su esplendor, lleno hasta la bandera, no se podía creer como Muñiz no expulsaba por doble amarilla una entrada a destiempo de Ramos que cortaba el claro ataque del Elche. Parecía que se la iba a sacar, pero quizás la presión le pudo al árbitro y decidió guardársela para evitar males mayores; terminó pitando falta sin darles mayor importancia.

Pero lo más incomprensible estaba por llegar. Tras aguantar tácticamente el medio del campo (es la llave del equipo merengue) los ilicitanos llegaron con empate a cero en el marcador al descanso.

En el segundo tiempo Cristiano golpeó primero en el choque, con un gol de falta tempranero que tras botarle delante a Herrera se coló dentro de la portería franjiverde (algunos señalan que no fue ni falta el gol). Lejos de cualquier estereotipo el Elche no decayó; muchos pensarían que tras el primero, el Madrid metería el segundo y el tercero casi por inercia, pero se equivocaban. El equipo de Fran Escribá defendió con uñas y dientes, y los cambios del míster local le dieron una marcha más a la presión que sometían al "equipo grande". Diego López sacaba manos prodigiosas, y cuando no lo hacia el balón salía lamiendo el poste como en un disparo a la escuadra de Aarón.

Pero en los minutos finales llegó la segunda y la tercera polémica de Don Muñiz Fernández. En el primer minuto de los tres del descuento Boakye remataba a gol una jugada de tiralíneas del Elche. Locura total que convertía en creyentes a aquellos que no imaginaban un guión semejante, y que recompensaba a los que sí creyeron en su equipo.

Pero por mucho que despejaba la defensa local, Muñiz no pitaba el fin del partido; incluso con un minuto más de lo añadido, y con el esférico en medio del campo no daba por finalizado el partido, esa fue la segunda polémica. Era como si el árbitro no dejara que acabara el encuentro hasta que el Madrid marcara el gol de la victoria; y vaya si pasó.

La tercera polémica, la más desmesurada de las tres. En un córner que salía minuto y medio del tiempo adicional, Pepe y Carlos Sánchez comienzan a agarrarse el uno al otro, sin distinción ni posibilidad de saber quién cogía a quién, hasta que los dos caen al suelo; penalti!!. Penalti que señala el gran Don Muñiz Fernández a favor de los merengues y que tras las repeticiones posteriores quedaba menos clara su decisión. Pero aún así habrá quien piense que acertó el colegiado, que bien pudo pitar que se repitiese el córner o incluso falta del defensa portugués, pero no; una vez más le pudo la presión y tomó el camino fácil. Cristiano materializó el penalti y ahí acabó el partido, 1-2 para los visitantes.

Una vez finalizado los jugadores se comían a Muñiz Fernández, que de nuevo fue protagonista, cuando los árbitros realmente no deberían serlo ya que ese no es su cometido.

Triste derrota del Elche que jugó con más mordiente y con más alma que el Madrid que no acaba de convencer a su afición. En cuanto al Señor Muñiz, no desesperen, de buen seguro que volveremos a ver su mejor versión, esa en la que siempre sale beneficiado el mismo factor sin alterar el producto. La liga es larga, el Elche va por el buen camino.