Orriols se estrena en Europa con todas las de la ley

Entre toda la parafernalia de la UEFA, incluido un traductor para la prensa sueca, irrumpió Juan Ignacio Martínez: “Olivica comía, huesecico al suelo”. Así de castizo. Un dicho de la Vega Baja con el que el técnico dejó claro que hay que ir paso a paso. Lo mismo en lo que ya había incidido Manolo Salvador a principios de semana: “Debemos pensar en el jueves y luego en el domingo, sobre todo en el domingo”.

Tras el aperitivo contra el Motherwell, el Levante debuta esta noche con todas las de la ley en Europa, pero lo hace con el mantra de no volverse loco. Por activa y por pasiva se ha repetido que lo importante es la Liga. Sin renunciar a nada, el equipo está obligado a competir con dignidad, pero no necesariamente a pasar de ronda. Tiene que dosificar energías, por lo que es posible que JIM tire hoy de rotaciones.

Se esperan bastantes novedades en el once. No parece que Pallardó, que era uno de los candidatos, vaya a jugar de inicio, pero tampoco que lo haga Barkero, que apunta al banco tras sus molestias. En ataque también hay muchas dudas con Gekas, que ayer se retiró del entreno a última hora. Parte del caudal ofensivo pasará por las botas de Míchel, en estado de gracia de cara a la portería rival.

Los granotas, pese a todo, formarán con un once competitivo ante el campeón sueco, un Helsingborgs que es el rival más débil del grupo, carente de jugadores de prestigio, y que lleva encerrado a cal y canto en El Saler desde el pasado lunes. “No son tan flojos”, ha intentado alertar Juan Ignacio, que ya tuvo elogios también para el Motherwell, al que se barrió por un global de 0-3. Un trámite para empezar con “lo bonito de verdad”.

Quien no estará seguro en el campo es Martins. El nigeriano es desde ayer uno más en el grupo, pero no está inscrito en la Euroliga. Compinchado con Gekas, al que ya se midió en Alemania, y con el italiano Volta como cicerone por la cercanía del idioma —tras su paso por el Calcio domina el italiano—, el delantero será una de las grandes atracciones… en la grada. A la espera de su puesta de largo, el equipo tiene que superar sus problemas ofensivos sin un jugador de contragolpe como él.