Las renovaciones en el Valencia, más allá del dinero

Jamás conseguiremos que nadie se quede sólo por dinero, con lo que el diferencial debe estar en otro punto

Toni Hernández | 22 ABR. 2024 | 00:04
Cristhian Mosquera

Las renovaciones que tiene que cerrar el Valencia no dependen sólo del dinero. Entre otras cosas, porque nosotros es imposible que podamos convencer a nadie de ese modo, es decir.

Por ejemplo, a Mosquera habrá muchos equipos que le den mucho más, pero mucho, con lo que si la idea es ampliar ese contrato que tiene hasta 2026, aparte de mejorar su salario, está claro que se le debe poner encima de la mesa un horizonte deportivo que sea atractivo de verdad, para que, sumado a seguir jugando en casa, se piense el hecho de continuar más tiempo aquí o hacer la maleta y marcharse a alguno de los destinos que ya están llamando a su puerta.

Esto ha sido así siempre, no pensemos que es nuevo, aunque sí es cierto que ahora tenemos una serie de cuestiones que lo hacen todo mucho más extremo, lo que encima complica las cosas, claro. Ocurre lo mismo con el entrenador. Baraja se quedaría aquí toda la vida, está en su casa, en su club, y el dinero no es lo que le va a llevar a tomar ninguna necesidad, porque en su caso, encima, no lo necesita como motivación.

Pero si no se le ofrece la opción de hacer un Valencia más grande, si se le condena a tener que sufrir siempre o hacer magia de forma constante, con lo que eso implica, lo normal es que no acepte, porque eso no es vida, y menos en el sitio que más quieres. Si todo el mundo quiere lo mismo y las deficiencias están más que controladas, lo que no tendría razón de ser es que no se le pusiera remedio, cuando no parece tan complicado hacerlo.