El mercado de enero más peligroso para el Valencia

El mercado de fichajes más peligroso en la historia reciente del Valencia. Porque nadie sabe qué va a pasar en esta ventana de enero, en la que, si fuéramos un club normal, sólo estaríamos hablando de las posiciones que se tienen que reforzar para poder hacer una mejor segunda vuelta que la primera. Pero se anda muy lejos de ese contexto, y lo que se desliza, y ya no tengo claro de dónde sale, es que ciertos jugadores están en la rampa de la lanzamiento.

Los nombres ya los sabemos, aunque mañana pueden ser otros, que a río revuelto, ganancia de pescadores, y y eso lo sabe todo el mundo. Aunque lo más duro de todo no es esto, que ya podría considerarse poco menos que un drama, sino que esa sensación de que aquí no hay plan, o mejor dicho, que el que haya no vale, es la que nos mata de forma definitiva. Baraja y Corona saben lo que falta, y lo que sobra, pero no depende de ellos cambiarlo.

Si Peter Lim no autoriza una sola operación de llegada sin que haya salidas, y estas no hay manera de poderlas cerrar sin que el equipo se debilite, nos encontramos con la pescadilla que se muerde la cola. Aunque en un giro de tuerca mayor, falta saber si, aunque se haga alguna salida, eso conllevará de forma inmediata que se haga un fichaje, o varios, para que el equipo esté más equilibrado. Una situación incómoda y delicada, y sobre toda muy peligrosa.