Las realidades paralelas en el Valencia

Se está empezando a afianzar el hecho de que lo que no conviene no existe, y lo contrario es poco menos que un dogma de fe

Toni Hernández | 20 MAR. 2023 | 00:01
Mestalla

En el Valencia estamos empezando a cogerle el gusto a esto de vivir realidades paralelas. O que simplemente no existen, o adaptar cualquier cosa que ocurre a nuestro interés, el de cada cual. Y eso, además de peligroso, lo único que consigue es encender más si cabe a un entorno que está ya al borde del ataque de nervios, que se encuentra sensible como pocas veces en la vida, y que no se merece que le traten así, de ninguna forma. Que hay mucho interés cruzado es obvio, y que estamos en guerra también, pero ni con esas podemos caer en la trampa, o la tentación, de intentar hacer que las cosas parezcan lo que no son, cuando es evidente que no lo son.

¿Que no me estoy explicando con claridad? Es posible, y por ello voy a un ejemplo gráfico, que de paso tengo claro que me va a costar algunos insultos más que añadir a la cuenta de mis amplias espaldas. El Nuevo Mestalla.

Si el club, el Valencia, Meriton, que todo es lo mismo pero le llamamos de formas distintas según interese, ha puesto en marcha la maquinaria de las obras, no es, en absoluto, por la presión social, y mucho menos la de los políticos. Si no hubiera aparecido en dinero de CVC, y la forma obligatoria de gastarla, nada de todo lo que viene sucediendo desde hace cerca de un año se habría dado, pero hay quien quiere ponerse una medalla de algo que, no sólo es que no le toque, es que ni se ha enterado por dónde sopla el viento.

Como esto, muchas más cosas, y eso no ayuda a luchar contra Peter Lim, porque dar carta de certeza a estas cosas es intentar pasar a la gente por tonta, y eso no justo, ni tampoco necesario. Vamos a vivir la realidad que tenemos delante, que bastante hay ya.