¿Pensar en Europa es una utopía para el Valencia?

El momento actual del Valencia es muy malo, 2022 le ha sentado de la peor manera al equipo y todavía no ha sido capaz de ganar en liga. Todas las ilusiones se concentran en la copa y es algo normal si somos realistas. Evidentemente la obligación del Valencia es la de quedar lo más arriba posible en el torneo de la regularidad pero habiendo tanta igualdad y teniendo en cuenta que al conjunto de Bordalás le ha costado sumar con los equipos que tiene por encima hacerse verdaderas ilusiones vía liga se antoja una quimera.

Hay un aspecto irrefutable que sirve para dar forma a la afirmación de que será complicado terminar entre los siete primeros. Desde que se accede a las competiciones europeas por medio de un puesto en La Liga (antiguamente la Copa de Ferias se jugaba por invitación) el Valencia nunca alcanzó una plaza partiendo de una posición tan baja como la actual en la jornada 24. En 1997-98 el Valencia de Ranieri era 11º y finalmente sí acabó jugando en Europa aunque para ello tuvo que pasar por la Intertoto. Se han vivido grandes remontadas en algunas temporadas, la más reciente en la campaña del centenario, pero ni siquiera en esa ocasión la posición era tan mala ya que el Valencia era noveno a estas alturas.

No obstante en el fútbol no hay nada imposible y aunque parezca un verdadero acto de fe es obligación de todos buscar el objetivo siempre y cuando existan opciones matemáticas. La Copa del Rey es el camino más corto para evitar lo que sería un nuevo fiasco.