La base del Valencia es ganar siempre en Mestalla

La base del éxito del Valencia de Bordalás, y de cualquier otro, es que seamos fuertes en Mestalla. De hecho, si no hubiera sido por nuestro rendimiento como locales los dos últimos años, el de Celades habría sido un desastre, y el de Gracia habría rozado el caos, con la sombra del descenso encima de nuestra cabeza. La derrota contra el Madrid fue un palo duro, por la forma y por el fondo, pero hasta el momento, el equipo se está mostrando solvente en su estadio, y eso es algo que se debe perpetuar aunque ahora tengamos muchas bajas.

Por cierto, sería cuestión de dejar de hablar de esto, porque al final saldremos once, con nuestra camiseta, y tanto repetir lo mismo al final nos va a parecer que somos menos. Pero volviendo al tema, y viendo cómo encara este tipo de encuentros el equipo del técnico alicantino, está claro que ser local debe ser un factor diferencial a favor. Ya no es decir aquello de hacer una fortaleza de Mestalla ni el resto de tópicos que acampan al mundo del fútbol, sino ir a la realidad que vivimos ahora.

El ambiente que había en el campo el día del Madrid, madridistas emboscados al margen, es de los que siempre dan ese plus al equipo cuando las cosas se ponen cuesta arriba. Y ahora mismo, este Valencia necesita el aliento de su gente, tanto por el apoyo que eso supone siempre, como por la necesidad de superar tanta adversidad junta en poco tiempo. Si la sintonía entre el verde y la grada sigue a este nivel, podremos perder puntos aquí, pero quien los gane los sudará como en la vida.