El legado que está dejando Peter Lim en el Valencia del Siglo XXI

Hace siete años estábamos heridos de muerte, aunque pasado ese tiempo, la sensación es que estamos mucho peor, que estamos vacíos

Toni Hernández | 31 AGO. 2021 | 07:00
Lim go Home...

Peter Lim llegó a un Valencia muy tocado en el aspecto económico y con una problema muy serio para afrontar la supervivencia. Pero estaba unido a nivel social, al menos hasta que se abrió el proceso de venta, que fue lamentable y barriobajero por parte de todos los actores que intervinieron. Ahí se dinamitó todo, y con ese caldo de cultivo entró Meriton. Han pasado 7 años, y muchas cosas, y ahora incluso podríamos hablar del legado que está dejando el paso de Peter Lim por el Valencia.

La mayor transacción de la historia del fútbol mundial, como la bautizó Aurelio Martínez, es ahora mismo un avispero con miles de problemas, con los planes estructurales parados en seco, y con un futuro económico y deportivo que está en manos de un máximo accionista que no se pronuncia, que no mueve ficha, que como acusa a las administraciones públicas valencianas, está llevando la inacción a un estado superlativo. Aunque más allá de todo esto, que es gravísimo, lo peor que está dejando es la fractura entre el valencianismo.

Por otro lado, hay una unión contra Lim y contra Meriton que nadie pone en duda. Nadie. Pero al mismo tiempo, hay quien ve la solución de un modo, y hay quien la ve de otro. Y ciertos sectores pretenden erigirse como los salvadores y los que dictan lo que está bien y lo que está mal. Si somos inteligentes, todos, no caeremos en esa guerra. El enemigo no es otro valencianista que piense de otro modo. Ese es el caldo de cultivo sembrado, el legado de Lim. Y eso sí que está en nuestras manos cambiarlo.