El Valencia de Bordalás gana su primer partido con un par

El Valencia de Bordalás arrancaba la Liga en Mestalla ante el Getafe. Esos caprichos del destino y del fútbol. Y las cosas no podían empezar peor, porque Hugo Guillamón era expulsado en el minuto 2 y tocaba remar con todo en contra nada más empezar. Volver al pasado en el primer momento. Pero en el 7, el fútbol volvía a hacer esas cosas suyas, y una gran jugada de Cheryshev terminaba en penalti. Muy claro. Y Carlos Soler, el nuevo 10 del equipo, hacía el 1-0 con su solvencia habitual. El partido volvía a cambiar, y estábamos ante otro escenario distinto.

Eso sí, el encuentro se endureció y volvió a recordar a los partidos entre ambos equipos no hace demasiado. Cerca de la media hora el partido estaba abierto, y eso ya era una buena noticia. Guedes debía aparecer más, algo que no pasaba, y que podía hacer saltar todo por los aires. En el 36, un error defensivo visitante ponía el 2-0 en bandeja a Cheryshev, pero el ruso no acertaba en el remate. El esfuerzo y el sacrificio del equipo era notable, lo mismo que el cansancio. Y la gran duda era la factura que podía pasar durante el encuentro. La primera mitad termina con ese 1-0, y con la sensación de que quedaba mucho…

La segunda parte empezaba sin cambios. El guión era esperar la oportunidad para una contra que pudiera poner el segundo, y defender lo mejor posible. Muy sencillo. Llegados al minuto 60, el encuentro seguía igual, y parecía que ambos conjuntos estaban esperando el momento ideal para dar el golpe. Llegando al ecuador de la segunda mitad, el partido se empezaba a romper, y eso nunca es bueno para el que va ganando. En el 77, Bordalás movía el banquillo, y Cheryshev dejaba su puesto a un Rubén Sobrino que empezaba a tener minutos cuando nadie lo esperaba.

El Getafe apretaba y se apuntalaba la zaga. Diakhaby y Jason entraban por Guedes y Soler, que habían hecho un esfuerzo enorme, especialmente el nuevo 10 del equipo. Faltaban 4 minutos para el final. Se entraba en los 6 minutos de añadido con las espadas en todo lo alto. En el 93, Mamar hacía una nueva parada antológica, completando un partido que pone las cosas muy serias de cara al futuro. El Valencia aguantó, sufrió y ganó. Buena primera victoria.