La "cagada" de Kang in Lee en el Valencia es culpa de todos: ¿se puede arreglar?

El problema viene de lejos, no tiene nada que ver con el caso de Ferran Torres, y responsables hay muchos, aunque sólo un perjudicado: el club

Toni Hernández | 24 FEB. 2021 | 07:00
Kang In Lee

La "cagada" del Valencia con Kang in Lee tiene muchos "padres", aunque ahora nadie quiera saber nada del tema. Hay muchos responsables, y por supuesto, eso incluye al propio jugador y su entorno, que aquí todos han cometido errores. El problema arranca en la temporada18/19, cuando se renueva el contrato a Lee y se le hace ficha del primer equipo. Marcelino apenas si cuenta con él desde enero a final de curso, pero ese verano explota a nivel internacional en el Mundial Juvenil del que es finalmente Balón de Oro.

Antes de que arranca la campaña 19/20, Lee se convierte en una patata caliente y en un medio para generar conflicto dentro del club. Marcelino y Mateu lo quieren cedido (que era lo lógico), pero Peter Lim (y el jugador y sus agentes), se niegan y quieren seguir en el primer equipo. La apuesta es arriesgada, porque si se queda es para jugar... El técnico asturiano es cesado, llega Celades, y aunque lo pone muchas veces al llegar, termina por jugar muy poco entre rendimiento, expulsiones y lesiones. Fue un año perdido en todos los sentidos.

Y llegamos a este curso, donde las salidas de todos los "buenos" parece que le otorgan un papel destacado. Empieza siendo titular, y hasta brillando. Pero Javi Gracia deja de contar con él pronto, y aparece y desaparece hasta que vemos su mejor versión el pasado sábado contra el Celta de Vigo. Un contrato sin renovar desde hace más de 8 meses, saltándose todos los márgenes lógicos en estos casos, porque el chico quiere ser importante, y aquí, no lo ha sido hasta ahora. Esa es la gran diferencia con Ferran, que cuando decide no renovar es una de las estrellas del equipo.

¿Se puede reconducir el tema de Lee? Como todo en la vida. Sus agentes, que no sólo es Javi Garrido, son valencianos, y para nada ajenos a todo lo que pasa y puede pasar. Con un año de contrato por delante a 30 de junio, es poco probable que haya una oferta de 25 millones de euros como la de Ferran. Y regalarlo no se le va a regalar. Vamos a ver qué pasa de aquí al final del año, pero esto debe ser un asunto de primer orden, y sin que nadie lo exija, debe tener la intervención de Peter Lim.