La permanencia es la prioridad pero no debería ser suficiente

No es momento de hablar de objetivos ambiciosos y la prioridad es conseguir los puntos necesarios para mantener la categoría cuanto antes, pero a partir de ahí los jugadores tienen que demostrar si merecen tener continuidad en este Valencia y apostar por ellos a largo plazo. Merecen el apoyo pero no la condescendencia ni el halago barato, es hora de hacer honor al escudo.

La permanencia no es ningún premio

A nadie se le debe llenar la boca hablando de Europa ni siquiera si se logra un triunfo en Madrid, pero lo realmente intolerable sería que se premie a la plantilla y el entrenador si se consigue un objetivo tan básico como mantener la categoría.

El discurso de Gracia ya se conoce

Los culpables de la difícil situación están en otras esferas, pero la opinión de Javi Gracia ya es de sobra conocida. Han llegado cuatro refuerzos (contando a Piccini) y dentro de lo malo el técnico tiene más recursos, Gracia tiene que demostrar su valía como entrenador.

Los futbolistas se juegan su futuro

O al menos así debería ser en un club normal. Hay poco que reprochar en cuanto a actitud pero en una entidad como el Valencia eso no tendría que bastar para tener ficha del primer equipo. Tramos finales como los de las temporadas 2015-16, 2016-17 o 2019-20 serían muy decepcionantes, el Valencia debe luchar hasta el final de liga y no dejarse ir en ningún momento. En las manos de la plantilla está que se pueda confiar en ellos, pero el entorno debe mantener el nivel de exigencia y no conformarse con lo mínimo a pesar del desastre de gestión.