El Valencia debe resolver el futuro de José Luis Gayà

El Valencia debe resolver de forma inmediata el futuro de José Luis Gayà, aunque el contrato del lateral zurdo de Pedreguer termine el 30 de junio de 2023. En tiempos vamos bien, porque realmente apretaría si estuviéramos a sólo 17 meses de acabar su actual vinculación (como en el caso de Kang in Lee este año o Ferran Torres el pasado). Aunque la trascendencia de la decisión supera todo este asunto de fechas y años. Porque va mucho más allá de hacerlo antes o después. Va de marcar un camino, un rumbo, de elegir a los líderes de un proyecto, con Lim con Lam o con la madre que lo parió, pero del Valencia en cualquier caso.

Porque Gayà no es un jugador más de la plantilla, y no sólo porque se trate de uno de los mejores del mundo en su puesto. Que va a tener ofertas de todas partes es algo evidente, por su rendimiento, por su edad y porque tiene toda la pinta de no haber terminado aún de mejorar. Pero el Valencia tiene la prioridad, tiene la mano, y eso debe aprovecharlo.

Y claro que hay que hablar de dinero, que aquí nadie juega por amor al arte, pero lo primero es tener claro que vamos a armar un equipo fuerte, a medio o largo plazo, incluso puede que renunciara al corto, pero se debe tener la garantía de que se va a hacer. Y para eso, el máximo accionista debe bajar a la tierra, con los mortales, y no enviar más a su presidente, que no puede ser más nefasto en todos los sentidos. Es José Luis Gayà, y esta vez no podemos volver a fallar.