El Valencia está muy lejos del Atlético de Madrid: debemos ganar al Elche

El Atlético de Madrid - Valencia era un partido vital para el equipo de Javi Gracia. Y lo era porque cuando nadie te espera en una fiesta, y debes acudir, ya que lo haces, que sea a lo grande. El guión del partido, de salida, era el esperado: balón para ellos, cerrar bien atrás y buscar la espalda en una contra. En el minuto 5, Jaume hacía una gran parada a un remate tras saque de esquina, cuando ya se cantaba el 1-0. Pero el Valencia devolvió el golpe, con una gran contra y llegada a linea de fondo, pero no hubo suerte en el remate de Vallejo. Y en la segunda, una jugada maravillosa del equipo, era culminada con zurdazo de Racic absolutamente colosal. 0-1 en el minuto 10.

El partido pasó a tener unos minutos en los que los locales parecían tocados, pero los visitantes seguían con su mismo plan de juego. Pero este equipo tiene esas cosas que marcan en negativo, y en un córner, Joao Felix hacía el 1-1 en el 21, con revisión de VAR incluida. El tanto, eso sí, otro terrible desastre defensivo del Valencia. Y lo más duro era que se estaba bien en el choque, y ese tanto colchonero no terminaba de hacer justicia. Llegadas por fuera, con mucha verticalidad, y un equipo colchonero que estaba siendo superado. Con empate a uno, y buenas sensaciones, terminaba la primera parte.

La segunda parte comenzaba sin cambios, y con la duda de si seríamos capaces de aguantar un ritmo tan fuerte como el del primer periodo. Pero en la primera jugada del segundo acto, Diakhaby caía lesionado. De nuevo un percance más… y entraba por él Hugo Guillamón. Otra forma de jugar, y otro tipo de centrales ante un equipo muy físico. Los primeros minutos fueron muy locales, y con el equipo de mascado atrás. Y en una contra, un buen balón de Joao Felix terminaba en un gran gol de Luis Suárez. Era el 2-1 en el minuto 54. En en el minuto 57, Guedes entraba por Cheryshev, que de nuevo dejaba un buen partido. Los locales daban un paso atrás buscando que el Valencia fuera dejando metros a su espalda, y esperando rematar el duelo con otra contra.

En el 66, un buen desmarque por dentro de Maxi recibía un gran pase de Yunus, pero el remate del uruguayo era detenido por Oblak. A falta de 20 minutos, el partido estaba donde le gusta al Cholo, esa era la verdad. Y en el 72, una contra dirigida por Llorente terminaba en el 3-1 de Correa. Era lo que se veía venir, y lo que sucedió. En el 78, se iba Vallejo, Yunus y Racic, y entraban Koba, Gameiro y Jason. Pero tampoco cambiaban las cosas. Derrota, que aunque fuera lo "normal", duele lo mismo porque la necesidad es inmensa.