El Valencia entra en situación crítica (2-1)

Derrota muy dolorosa del Valencia en Granada, el equipo se hunde en la tabla. Las acciones infantiles provocaron el desastre

Jose Hernández | 30 DIC. 2020 | 18:59
Granada-Valencia

Partido loco en Granada en el que pasó de todo, el Valencia volvió a sumar otra derrota. Los errores infantiles condenaron al conjunto de Gracia.

Javi Gracia apostó por Esquerdo como acompañante de Soler en el centro del campo. No se vio a un Valencia demasiado distinto al de los últimos encuentros, el equipo esperaba atrás e intentaba buscar las contras. A pesar de la ausencia de Maxi en el once los de Gracia fueron capaces de crear peligro. El Granada golpeó primero con un disparo lejano de Kenedy que Jaume no pudo repeler, el VAR salvó al Valencia. Gameiro avisó en el ecuador del primer acto y fue el autor del gol que abrió el marcador al rematar un buen pase de Cheryshev. Se le pusieron muy bien las cosas al Valencia pero nuevamente el infortunio se cebó con los blanquinegros. En el tiempo de descuento Kenedy lanzó una falta, la barrera estuvo pésima y Gameiro tocó ligeramente el balón, Jaume hizo la estatua y el balón terminó en la red. Un despropósito coral.

El Valencia intentó llevar el control de la pelota tras el descanso, pero fue incapaz de crear peligro. Sí llegó el Granada hasta en tres ocasiones, pero los andaluces perdonaron demasiado en la definición. Jason se convirtió en protagonista negativo del choque al ver la segunda tarjeta amarilla que le costó la expulsión, la primera había sido por protestar. La losa se hizo mucho más grande después de que Guedes también viera la roja tras insultar al colegiado. Una auténtica película de terror ya que el Valencia se quedó con nueve hombres en solo dos minutos. El Granada se quedó con diez después de que Vallejo provocara la expulsión de Domingos Duarte.

El partido estaba loco a falta de trece minutos y los dos equipos tenían opciones de ganar, pero en el 88 de juego llegó el gran mazazo. Jorge Molina remató en el área pequeña y adelantó a los locales. El Valencia buscó el empate con más corazón que cabeza pero la derrota fue inevitable.