Las razones por las que el Valencia empató contra el Athetic de Bilbao

Reflexiones tras el Valencia - Athletic de Bilbao. Empate triste en un partido en el que el VCF demostró que le tiemblan las piernas cuando va por delante en el marcador. Los goles vascos llegaron por reiteración. Ceder tanto campo al rival acaba en asedio y, casi siempre, en goles encajados.

Los dos últimos encuentros muestran cierto estancamiento en el progreso del equipo. Se puede defender de forma ordenada, pero hay que combinarlo con amenazas ofensivas, porque con 0-10 en la estadística de corners, muy poco se puede conseguir.

Decir que vas justito de mediocentros es ser excesivamente optimistas. Y eso se paga en el juego, porque la pelota se atasca en el inicio de jugada. ¿Solucion? Yo probaría ahí al único jugador en la plantilla capacitado para jugar con precisión: Kangin Lee.

Gracia. Sigue apagado, no sé si impotente o desmotivado. Los mejores momentos del equipo fueron las segundas partes de Elche y Vitoria, justo cuando no había nada que proteger. El técnico debe conseguir que se juegue con esa intención, aunque te arriesgues más.

Paulista. Cortó casi todo lo que le llegó a su zona que fue mucho. Fue el protagonista de una imagen icónica del partido. Un suspiro de agobio en la enésima ocasión en la que tuvo que abortar un centro rojiblanco. Todos respirábamos así en casa pensando en cuánto iba a durar.

Wass lleva unos partidos en los que no aporta casi nada. Creo que es más justo que vuelva Correia, al que una infantil expulsión le ha sacado del 11 inicial sin otros argumentos futbolísticos. Hace falta su frescura. ¡Quién lo iba a decir!

Cheryshev y Jason. Su trayectoria en Primera les obliga a mucho más que a jugar unos ratitos para cumplir el expediente pasando con más pena que gloria. Ni son jóvenes, ni cobran poco, ni se han merecido más minutos. Camino de la decepción total.

Yunus. Debemos darle aire al chaval. El golazo ante el Getafe, la selección, la renovación. Todo le ha venido muy rápido a un jugador que iba a empezar en el Mestalla. Quitarle la presión de la titularidad no sería mala idea. Porque descansarían sus piernas y su cabeza.

Vallejo. Se está empeñando en quitarme la razón y me alegro. Pienso que a la larga su aportación no va a ser muy trascendente, pero la pelea no se le duda y casi siempre tiene una que acaba en gol o se queda cerca. Con el nivel tan bajo en ataque, es de lo más activo.

En plena temporada televisiva, donde todos los espectadores son audiovisuales, es indignante que aumenten las dificultades para seguir el juego. Entre las sombras y las luces del mediodía y la cantidad de blanco del Athletic en su indumentaria, fue un suplicio. A mejorar.

Copa de Rey. Se avecina un once inicial que nos sitúa aún más en nuestra ubicación real. Me parece bien que jueguen pocos titulares, pero que lleve pólvora al banquillo. Una cosa es perder, otra salir ridiculizado de una competición. Eso no está permitido.