El Valencia rescata un empate tirando de orgullo... cuando perdía

Encuentro muy flojo, muy plano, y que refleja de nuevo que, cuando quiere, este equipo puede, aunque quiere demasiadas pocas veces

Toni Hernández | 12 DIC. 2020 | 15:54
El Valencia celebra un gol

El Valencia - Athletic de Bilbao empezaba con novedades en el once de Javi Gracia, con la inclusión de Diakhaby por Mangala. Las bajas no permitían más alegrías a los valencianistas. El encuentro comenzó con mucho ritmo, y ambos pisando las áreas rivales. Eso sí, los visitantes arrancaban mejor, y llegaban demasiado por fuera, con mucha facilidad. Llegados al primer cuarto de hora, el Valencia estaba muy atrás, demasiado. A partir de ese momento, los de Gracia espabilaban un poco, que ya iba siendo hora.

Primero llegaba un tiro al palo y en el minuto 25 llegaba el penalti a Maxi Gómez, bastante claro, y que venía en un momento perfecto tal y como estaba el encuentro. Carlos Soler lo convertía en el 1-0, que lo celebrada con rabia contenida. El Athletic apretaba espoleado buscando el empate, y Jaume, otra vez, tenía que hacer una parada extraordinaria para seguir manteniendo el resultado favorable. El duelo caía hacia el final del primer tiempo, que terminaba con esa ventaja local en el marcador.

La segunda mitad empezaba sin cambios, y con la necesidad de que el Valencia diera un paso adelante para intentar cerrar el encuentro. La idea era aguantar bien atrás y buscar las contras a la espalda de la defensa rojiblanca. Pero se defendía demasiado atrás, lo que al final llevaba a los visitantes a empatar en una acción demasiado indolente de la defensa. El gol era justo, porque el encuentro era de tablas hasta ese momento. En el 59, un desdibujado Musah se marchaba dejando paso a Cheryshev, que volvía después del COVID-19. En el 70, Correia y Jason saltaban al campo por Wass y Guedes. Cambios que debían aportar mucho… El partido se rompía llegando al último cuarto de hora, y se lo podía llevar cualquiera, aunque los forasteros estaban mejor.

En el 78 Racic cometía un claro penalti y al lanzamiento estaba Raúl García. Jaume la tocaba, pero el balón entraba. 1-2 faltando 11 minutos. Sólo quedaba la épica y que hubiera algún error para poder sacar algo. Y en esas llegó una falta lateral, en el 82, el portero del Athletic fallaba, y Manu Vallejo acertaba para el 2-2. Quedaban 8 minutos. En el 86, una jugada enorme del propio Vallejo y un taconazo de lujo de Soler para que el gaditano rematar, se iba fuera por muy poco. El equipo se crecía, pero quizá un poco tarde. Un empate que es sumae... pero muy poco.