Poco fútbol y demasiadas excusas

Opinión/ Ni siquiera la importante victoria ante el Real Madrid ha conseguido calmar los ánimos, el fútbol sigue en un segundo plano

Jose Hernández | 18 NOV. 2020 | 08:05
Anil Murthy

Poco que añadir al análisis sobre las declaraciones emitidas por Anil Murthy en las últimas horas, la propiedad sigue muy alejada del sentir real de la gente y vuelve a demostrar que no tiene ninguna intención de cambiar las cosas. No es algo que sorprenda y Meriton se ha quedado ya sin "Fans" que aplaudan sus decisiones y perspectivas de futuro. Se sigue vendiendo una visión positiva del trabajo realizado y se trazan unas líneas de cara al futuro que tan solo provocan que las dudas crezcan. Ahora se compara el camino realizado con las decisiones de otros clubes, siempre con la crisis del COVID como trasfondo pero de nuevo situando al Valencia en una posición de equipo pequeño y a remolque.

Y todo esto en medio de un parón que en teoría debería haber sido tranquilo tras la alegría del triunfo ante el Real Madrid. Este fin de semana el Valencia de Gracia tendrá una cita más importante de lo que parece, ganar en Vitoria haría ver la tabla con otros ojos y daría una dosis de fuerza extra para afrontar los compromisos que vienen. Pero parece que desde Meriton se piensa en cosas distintas, ya se han acostumbrado a vivir en el incendio permanente y las acusaciones al entorno dirigen el día a día de la entidad.

Se justifican las ventas y decisiones (se podría hacer de otra manera aunque pudieran existir argumentos favorables), pero lo que ocurre en el terreno de juego no deja de quitar la razón a aquellos que son dueños de la mayoría accionarial pero también creen serlo de la razón absoluta. Anoche Ferran Torres volvió a demostrar que el Valencia ha "regalado" a un futbolista de valor incalculable. Lejos de las polémicas y las formas elegidas por Ferran, verle jugar de esta manera lejos de Mestalla escuece. El fútbol vuelve a arrebatarle la razón a Peter Lim y sus subordinados una vez más. Mientras tanto la propiedad prefiere hablar de otros temas.