Nadie en Valencia se cree a Peter Lim

Opinión/ Cada vez existen menos partidarios de Meriton en la ciudad, los hechos han terminado por sacar a relucir las miserias de la gestión

Jose Hernández | 07 OCT. 2020 | 08:00
Peter Lim

Lamentablemente el valencianismo se convirtió hace pocos meses en una guerra entre los críticos con Meriton y un reducido grupo de fieles que seguían creyendo que Peter Lim estaba interesado en hacer un Valencia grande en lo deportivo. Han sido seis años de gestión hasta el momento, con demasiadas mentiras y despropósitos. Es cierto que hubo algún momento bueno, y por eso duele más que un año después aquella ilusión por hacer las cosas bien sea parte de un pasado que parece demasiado lejano. Peter Lim es el único culpable de que el Valencia se haya convertido en blanco de las burlas y mofas de muchos aficionados de otros clubes, aquellos que no dan crédito a la falta de criterio y el escenario de autodestrucción que se vive desde que los actuales propietarios llegaron (insistimos, con algún momento bueno).

Lo ocurrido en esta ventana de fichajes ha sido la gota que ha unido al valencianismo. Definitivamente Peter Lim ha decidido hacer la guerra por su cuenta sin atender a ningún consejo o petición de sus propios empleados (el desprecio a Javi Gracia es la mejor prueba). No contento con dilapidar la plantilla traspasando a precio de saldo, desde el club se vendió la idea de que llegarían fichajes pese a ser época de austeridad. Muchos han pedido explicaciones públicas de las decisiones tomadas durante el verano, pero ¿para qué hubiera servido? los mensajes emitidos por el club durante este tiempo se han limitado a excusarse con la boca pequeña y maniobrar de manera zafia en el mercado. Porque ni siquiera se ha fichado algo de cara a la galería con el fin de calmar el ambiente.

Ahora todos se preguntan qué es lo que quiere hacer Peter Lim con el Valencia. Se podría pensar que esperar a que la crisis del COVID amaine y confiar en que el equipo haga una temporada decente para rearmarse. Pero después de tantas mentiras y de tantos desprecios a empleados dignos y a la prensa, únicamente se debe pensar que el propietario se ha cansado del Valencia y no tendrá el menor escrúpulo. La situación es más grave de lo que parece y obviamente a Peter Lim no le van a impresionar ni las críticas ni las manifestaciones de aficionados contra su gestión. Este verano ha tomado una dirección definida y solo queda esperar que el final del túnel no conduzca a una escena irreparable. Otros clubes ya han vivido ejemplos similares y sus seguidores también fueron engañados, ahora en Valencia se ha reaccionado y la fractura entre Meriton y la afición no tiene punto de retorno.