Repartir carnets de aficionado del Valencia agota

Cada uno siente este club a su manera, y quien señala y acusa es muchas cosas y ninguna buena, aunque se crea lo contrario

Toni Hernández | 23 SEPT. 2020 | 09:00
Afición del Valencia

He repartido muchos carnets de aficionado del Valencia en mi vida. Durante muchos años, y de manera muy maleducada muchas veces. Con prepotencia, con soberbia, poco menos que insultando al que pensaba distinto a mí. Siento vergüenza de esa forma de actuar, no ayuda a hacer valencianismo, aunque desde luego hace que los que piensen como tú lo hagan de forma más acérrima. Puede que alguna mente corta de entendederas no llegue a atisbar que clases de valencianismo no da nadie, porque nadie tiene la verdad absoluta.

Y contar con un medio de comunicación diario no te hace ser más nada, simplemente te convierte en periodista, en contador de cosas (siempre me gustó pensar que yo era eso) o en mono de feria. Eso ya lo elige cada uno en función de sus criterios. Insisto en que estar todo el día diciendo quiénes son los buenos y quiénes son los malos, es agotador. Pero mucho. Porque encima, esos que se pasan la vida señalando, que como todos, tienen muertos en el armario, ven a gentuza en todos aquellos que no piensan igual. Ven a vendidos, a mamadores, a tipos que van con rodilleras.

Y con perdón, tiene cojones que haya gente en esta ciudad que amenace a nadie porque tenga otra forma de pensar. Es aterrador, porque da mucho miedo. Mi valencianismo es mío, y no se tiene que parecer al tuyo. Y seremos los dos igual de valencianistas. ¿Y sabes cómo lo tendrás claro? Porque cuando marque un gol nuestro equipo, los brazos irán al cielo, y el grito será atronador por parte de los dos.