La venta del actual Mestalla para terminar el Nuevo

El final del Nuevo Mestalla depende de vender las parcelas del actual estadio. El plan fue diseñado por Juan Soler en 2006, cuando se aprobó y presentó el proyecto de la futura casa del valencianismo, y en casi 3 lustros, no ha cambiado ni un ápice. ¿Se debió apretar a Peter Lim en el contrato de venta para dejar firmado que si no se vendían, las compraba él? Por supuesto que sí, pero de ese proceso hay tantas cosas que contar, que acabaríamos todos mal, muy mal. Peor de lo que estamos ahora, que ya es.

Esta semana hemos sabido que el máximo accionista del club ha desestimado ofertas entre 85 y 90 millones de euros por las famosas 5 pastillas... y ha habido a quien le ha sabido mal. Y personalmente no lo entiendo. A mí me enfada más que no se las quede él en lugar de rechazar ese dinero, que es poco, y por mucho que diga elespanol.com, por debajo de precio de mercado. Se necesitan casi 120, y tirar 25-30 más a pérdodas es fácil de aprobar... cuando no son tuyos.

Lim no acepta por Mestalla, el actual, por menos de lo que vale. Y aunque estemos cabreados hasta arriba, y con razón, por muchas cosas de las que hace Meriton, hay otra que no nos pueden alterar. Más bien al contrario. Que rechace ofertas por el actual estadio significa que se mueve. Y que el Nuevo Mestalla sigue vivo. Y que Lim, aunque no lo parezca a veces, se interesa por "su empresa".