La crisis del Valencia de Meriton I: acabar el Nuevo Mestalla

Es la primera piedra del camino, la que puede resolver muchos problemas, y el arma con el que se va a presionar al máximo accionista

Toni Hernández | 14 AGO. 2020 | 07:00
Nuevo Mestalla

La crisis del Valencia de Meriton tiene un punto caliente, quizá el más delicado, en el Nuevo Mestalla. La ATE cumple el 15 de mayo del año que viene, la fecha tope para empezar las obras. Y el ayuntamiento de la ciudad no deja pasar una oportunidad de amenazar al club con no prorrogar el acuerdo y que pierda todos sus derechos urbanísticos. Sería un caos económico para la entidad, posiblemente causa de disolución. Pero no de Meriton, sino del Valencia.

El consistorio que haga lo que tenga que hacer, cuando tenga que hacerlo. Pero igual que Sandra Gómez lanza mensajes subidos de tono, le diré que se fije bien en la manifestación del miércoles en la puerta de Mestalla contra el máximo accionista. Cuando el valencianismo identifica un enemigo, es igual de implacable con todos. De aquí y de allí, no nos olvidemos. En cualquier caso, y con este tema al margen, la pelota está en el tejado de Peter Lim de forma irremediable.

El máximo accionista debe poner en marcha el estadio. Primero por la ATE, sin duda, y después porque tiene que ser la máquina económica del club en la próxima década. Algo que Meriton ha dicho en más de una ocasión durante estos últimos meses. Ese paso es clave para todo lo demás, porque el futuro del Valencia, y el del dueño aquí, depende en gran medida de que este paso se dé, y con toda la firmeza del mundo. Y no se puede retrasar un solo día más, por el bien de todos.