La demagogia en el entorno del Valencia a cuenta de Gonzalo Villar

La demagogia del entorno del Valencia a cuenta de Gonzalo Villar es algo absolutamente sensacional, digna de estudio. El murciano, varios años en la escuela del club, era una de las grandes joyas que se tenían, en opinión de los técnicos, y es tan bueno ahora como cuando hace unos meses se le echó del club, porque se hizo eso, cuando se volvió loco a la hora de renovar su contrato. Mateu Alemany tomó la decisión de mandarlo a Elche, porque su comportamiento había sido impropio.

Se aplaudió aquello, yo fui el primero, aunque el club se guardó una opción de repescarlo por si acaso. Cuando Villar salió, nadie dijo nada, posiblemente porque casi nadie lo había visto jugar en su vida, que aquí nos encanta tocar de oído y que parezca que sabemos mucho. El chico se fue al Elche y la rompió, cosa que estaba dentro de lo previsible. En enero tiene la oferta de la Roma y el Valencia tiene la opción de igualarla y que se vuelva. Se fue porque los italiano apostaron más fuerte a nivel deportivo, que no a nivel económico, y eso lo valoró el jugador y el entorno.

Me parece perfecto, sin duda. ¿Se “pasó” de él? Pues la respuesta es que no, aun a riesgo de que pudiera explotar y hacerse un gran jugador, que es algo, insistimos, que se piensa en Paterna desde hace años. Cuando se le echó era un impresentable, cuando no ha vuelto porque eligió a nivel fútbol otra cosa, es el nuevo Parejo. Yo también lo hubiera traído de vuelta, de hecho escribí sobre ello, pero de ahí a montar un drama y rasgarme las vestiduras, hay un trecho largo.