Exigir a Peter Lim que venda el Valencia... ¿no sería más lógico exigir que alguien compre?

Que no, que esto no funciona así, que esto es una empresa por muchos sentimientos que hagamos, y que la demagogia también hay que saber hacerla

Toni Hernández | 30 JUN. 2020 | 10:47
Benvingut Peter

"Hay que exigir a Peter Lim que venda el Valencia". La frase no puede ser más vacía ni más populista. Porque encima va a haber gente que se crea que eso es posible... y esto funciona así. Que un tipo que invierte 200 millones de euros, amén de avalar una serie de compromisos, decida por aclamación popular que no, que ya no. Que no somos un club de fútbol, que somos una maldita Sociedad Anónima Deportiva, viciada desde su nacimiento, y que ha contado con accionistas, nosotros mismos, que por 600 euros vendimos el alma al diablo.

Peter Lim venderá el Valencia cuando pasen dos cosas. La primera, que a él le dé la real gana venderlo. Porque aquí ya no van a valer presiones políticas como en otro tiempo, ni pañuelos ni manifestaciones, que no lo queremos ver. Y la segunda, más importante casi que la primera, es que hay un comprador. Alguien que ponga esos 200 millones de euros, y que tenga claro lo que conlleva ser el dueño de este club. Porque el sueño de "recuperar el Valencia", como si de verdad hubiera sido nuestro, no tiene ni pies ni cabeza, por mucha demagogia que le pongas.

Y es que hasta para ser demagogo tienes que valer, y hacerlo muy bien, porque eso también es un arte. Puedes encabronar a la masa, llevarla al extemo, decir que este dueño funciona en el club como le pasa por el forro de sus caprichos, que será verdad y tampoco se esconde, pero no podemos ir con el cuento de exigirle que venda. ¿Cuánta gente con dinero compra? Y trileros que piden la gestión sin poner un euro no cuentan, que las bobadas deben terminarse ya.

No queremos aceptar lo que somos, que encima lo somos por nuestrra culpa, y cargamos contra un tipo que simplemente maneja su empresa. "Es que el Valencia no es una empresa". No lo será para nosotros, que no hemos puesto 200 millones, para Lim, sí. ¿Hay alternativa de compra? No. ¿Hay que callarse? En la vida, porque estaríamos muertos. Pero si de verdad queremos aportar y no ser simples pirómanos por mucha razón que pensamos que nos asiste, hay que ofrocer soluciones y alternativas reales. Y si tiene que ser con esta propiedad porque no hay otra, pues con esta. ¿O acaso alguna vez nos han preguntado nadie a quién queríamos de entrenador o de delantero centro? ¿Cuántos de nosotros hemos sido directivos o consejeros? Nos podemos seguir engañando, pero eso es malo y peligroso.

Y los medios tenemos una responsabilidad. Las filias y las fobias se nos han ido de las manos. Hemos pasado de ser los que cuentan las cosas a forzar que pasen las cosas que nosotros queremos, y esa no es nuestra función. No controlamos el Valencia, no nos filtra nadie, y le cogemos cariño a aquellos que están dentro y nos dicen cosas. Y luego, cuando los echan, bramamos contra el que lo hace, porque nos corta el grifo. ¿Que me van a poner a parir? Si es que me da igual, la libertad de decir lo que uno piensa no se paga con dinero.

Tenemos el Valencia que nos hemos ido ganando, y ahora, lo que toca es pedirle al dueño, mientras lo sea, que no se equivoque más, que vuelva a generar una estructura empresarial y futbolística de primer nivel, que cuente con la gente de aquí, que nos hable a todos a la cara y de forma clara, que no nos comemos a nadie. Tengo muy claro que hay gente que no quiere que esto funcione, que se arregle, salvo que sea con los "suyos". A mí me da igual con quien sea, con los suyos, los míos o con la madre que los parió. Lo que quiero es que funcione.