El Valencia de Celades es un equipo como la copa de un pino, lo sigue siendo

El Valencia de Albert Celades es un equipo como la copa de un pino. Es algo que hemos dicho varias veces en este largo año, que en diciembre pudo su punto álgido, pero que luego quedó un tanto emborronado con ese 2020 tan raro e infausto que se hizo especialmente fuera de casa, con esas goleadas en contra que no corresponden a un equipo de esta categoría. No vamos a entrar en todo lo que ha pasado este año, porque ya lo hemos contado muchas veces y ese agua no volverá a mover este molino, pero es obvio que no ha sido una temporada normal de ninguna de las maneras. ¿Que tenemos carencias? Pues claro que sí, en caso contrario seríamos campeones de todo, pero desde luego no somos el séptimo equipo del torneo, como dice la clasificación.

Tampoco tenemos al mejor entrenador de Europa, pero el peor no es. Y no entro en si Celades debe ser o no el técnico de este equipo, porque no lo decido yo, aunque ya he dicho muchas veces que no hubiera sido mi elección en su momento. Pero el catalán ha demostrado que sabe llevar el vestuario, que se ha ganado su confianza, y que dentro de la decisión del Valencia para que siga, me gustaría verlo en un contexto más normal, menos accidentado, con sus ideas y con los jugadores adecuados para ellas. Incluso con el 4-4-2 y esta plantilla, que ya hemos visto que le puede sacar un gran rendimiento porque la materia prima es muy buena. Sinceramente, nos debe dar para entrar entre los cuatro primeros. Sin ir sobrados ni nada por el estilo, simplemente entrar.