Cuando os pregunten qué es ser del Valencia: "yo soy Baraja"

Se han cumplido 10 años de su adiós, pero su legado sigue vivo, y la añoranza de verlo en el banquillo de Mestalla, más viva que nunca

Toni Hernández | 17 MAY. 2020 | 08:21
Rubén Baraja

Cuando alguien os pregunte qué es ser profesional, sentir un club, tener sentido de pertenencia, respetar el escudo dentro y fuera del terreno de juego, y ser uno de los mejores futbolistas que ha pasado por el Valencia en toda la historia, simplemente hay que recordar una frase mítica: “yo soy Baraja”. Hace 10 años que Rubén se despidió. Recuerdo aquellos días, porque fueron muy duros. La semana anterior, Manolo Llorente anunciada que no se le renovaba el contrato… y se lo decía a Canal 9 sin haber hablado con el jugador. El Pipo se enteró así. Lamentable hasta decir basta, pero ni así se le sacó una sola mala palabra del club, nunca. Jamás. En eso es igual que Ricardo Arias, y quizá por eso, entre otras muchas cosas, son a dos de los tipos que más quieren en el mundo del fútbol. Tuvo ofertas para seguir jugando, pero en España tenía claro que no, y fuera no se podía ir por una serie de cuestiones familiares.

Se decidió a ser entrenador, y tuve el honor de firmarle las prácticas del nivel 3 porque las vino a hacer con nosotros a Huracán. Aquel juvenil División de Honor entrenado por Emer Esteve (hoy en el Valencia), no lo olvidará jamás. Lleva peleando años por llegar a la élite, a Primera, y lo ha tenido cerca, pero sigue en el camino con la máxima ilusión. Lo logrará, porque desde aquel día que se marchó por el túnel de vestuarios de Mestalla, ante la mirada de Españeta, todos estamos deseando que vuelva a salir convertido en entrenador del equipo. Hacemos muchas encuestas para saber o determinar quién ha sido el mejor jugador de la historia. Pero eso engloba muchas cosas, y no he visto a nadie, salvo Arias y Baraja, que estén a un nivel como ese en todas las facetas. Sí, para siempre, cuando llega la noche, yo soy Baraja.