Lo más importante del Valencia 2019: Anil Murthy, el presidente

Ha sido un año en el que ha sido protagonista en demasiadas ocasiones, y en el queda marcada por su gesto de mandar callar a Mestalla

Toni Hernández | 25 DIC. 2019 | 09:00
Anil Murthy

Que Anil Murthy sea presidente del Valencia es algo que cuesta digerir por muchos motivos. No he hablado con él en persona en mi vida, siempre quedó pendiente aquel café de hace unos años, y aunque no creo que sea el peor máximo mandatario que haya tenido el club en su historia (tenemos una memoria muy corta para determinado tipo de cosas), sí que es obvio que aquel gesto el día del Alavés, mandando callar a la grada, no se puede permitir. Y eso es lo que al final se come todo lo demás, porque esa acción lo va a perseguir siempre, y va a ser un lastre que no tengo nada claro que se puede quitar de encima. Y creo que Murthy no es un tipo torpe, en absoluto, y aquel día le pudo la presión, como nos hubiera pasado a todos. Pero es que todos no somos presidentes del Valencia.

Se la acusa de manejar el club como si fuera un cortijo, tomando decisiones personales al libre albedrío. Y digo yo que si eso no es lo mismo que ha pasado en esta santa casa toda la vida. Recuerdo cuando Llorente acumulaba los finiquitos sobre su mesa, aquella famosa frase de “puesto amortizado”, y la purga que se hacía en el Valencia era de órdago. Aquello no debió pasar, y los más de 30 empleados que salieron de mala manera no existían. Murthy ha generado una estructura a su imagen y semejanza, como hubiéramos hecho todos, pero con errores. Dando por sentado que seguirá a pesar del gesto del silencio, debe ser más cercano, y sobre todo, solucionar de una vez el problema de la grada de animación. Sacar a los violentos es para aplaudir, pero ahora nos queda levantar Mestalla.