Ponga un Coquelin en su vida... y eso que no iba a triunfar

El jugador galo que vino del Arsenal es un diamente en bruto, que si dejara de lesionarse tanto, sin duda sería una piedra preciosa de valor incalculable

Toni Hernández | 05 DIC. 2019 | 08:00
Francis Coquelin

No tenemos claro aún el pedazo de jugador que es Francis Coquelin. Y eso pasa fundamentalmente por el gran problema que está teniendo desde que llegó a Mestalla. En los casi dos años que lleva, llegó en enero de 2018, apenas ha jugado 46 partidos de Liga, 7 de Copa y 15 de competiciones europeas. 68 encuentros, 52 como titular, de los 107 que han disputado desde que llegó al club. Es decir, ha jugado poco para el peso que tiene en el equipo, en la plantilla y en el entorno, porque ahora mismo pasa por ser uno de los futbolistas con los que más se identifica la grada, y eso no es nada fácil en tan poco tiempo. Su jugada en la final de la Copa del Rey muriendo por un balón ya forma de la historia de esta entidad para siempre.

Si las lesiones le llegan a respetar de versad, si tuviera continuidad de forma constante, desde luego pasaría por uno de los mejores jugadores de la Liga en esa posición. Vamos, en las varias que puede llegar a ocupar. Porque aunque su rol de salida es el de medio centro de corte defensivo, puede actuar en muchas más posiciones, y eso a un entrenador le da la vida. Si lo podemos tener de forma permanente, con su calidad, su garra y su carácter, el Valencia va a ser mucho más equipo, y con la vuelta de Kondogbia, simplemente un equipo como una catedral. Lo que somos aunque haya quien lo pusiera en duda. Y eso que cuando llegó algunos "parabólicos" vaticinaron que no podría triunfar, que era torpe, que la calidad no le daba...