No creer en este Valencia es un pecado capital

Criticar a este Valencia es muy injusto, casi indecente. Y todos aquellos que se hayan pasado las últimas 48 pegando palos al equipo por su falta de puntería, que me perdonen. O que no lo hagan, me da igual, pero servidor con este equipo se va al fin del mundo, tengamos más o menos gol que los demás. Este grupo todavía está madurando, aunque alguno no lo crea o piense que con ganar la Copa del Rey al Barcelona estaba terminado el proceso. No, eso no va así, y pongo un ejemplo muy gráfico: el Valencia que gana la Liga en 2002 no se mete ni en Champions el año siguiente, y al otro hizo la mejor temporada de todos los tiempos. Son procesos, y no de Play Station, sino de vida real, con personas de verdad y con situaciones de verdad.

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— Fútbol en Movistar+ (@MovistarFutbol) November 28, 2019

Leía muchos “peros” después del partido contra el Chelsea, demasiados. “Gran partido, pero no podemos fallar tanto”, sería un buen resumen del sentir general. Pero fallar ocasiones forma parte del fútbol, y ahí me voy a lo que seguro que pensó Albert Celades y cualquier entrenador del mundo en su lugar: "si hemos fallado 10 ocasiones, es que hemos creado 10 ocasiones, y esas acabarán entrando”. No podemos permitirnos una duda con este equipo, porque no se merece si quiera eso, que podamos tener la misma mínima duda respecto a ellos. Debemos llevarlos en volandas el sábado contra el Villarreal, que va a ser un partido muy duro, pero que tenemos que ganar. Y es que la mejor forma para llegar a Amsterdam es esa, vencer contra los amarillos y contra el Levante.