La hipocresía con las cuentas del Valencia

No soy economista, no sé leer un balance, y es posible que no lo entienda ni aunque me lo expliquen, y aquí sacamos conclusiones en 5 minutos

Toni Hernández | 13 NOV. 2019 | 23:00
Junta de Accionistas del Valencia

Las cuentas del Valencia son ahora el tema de conversación vital, justo después de la rueda de prensa caballerosa y sensorial de Mateu Alemany para su despedida. Siendo sincero, y hay que serlo, soy incapaz de hacer lectura correcta de un balance económico, de poder entender de qué hablamos con exactitud en cada partida, y mucho menos comprender qué significan determinados aspectos técnicos. ¿Me quedo con que la deuda es de 529 millones, 300 a largo plazo (que pueden enjugarse con la venta del actual Mestalla y la cancelación de hipotecas)? ¿Es bueno el dato de 1,4 millones de superávit del curso pasado? ¿Era buena la operación de maquillaje económico de Mateu Alemany con Neto para equilibrar el balance o era una chapuza?

La interpretación y lectura de las cuentas, desde que tengo uso de razón profesional, siempre ha sido usada a beneficio del que lo hacía y siempre según sus propios intereses. LaLiga dice que la salud económica del club es excelente, vatios informes que se han dado a conocer en el último año afirman lo mismo, pero ahora nosotros vemos unos datos y nos tiramos las manos a la cabeza. Incluso ahora es mala operación lo de Neto cuando todos sabíamos lo que era. Y nos rasgamos las vestiduras porque tenemos que vender activos por valor de 40 millones antes del 30 de junio, que igual son menos si llegamos a los cuartos de final de la Champions o ganamos la Súpercopa. Lecturas interesadas, siempre, y la hipocresía por montera. Es el club, ante sus accionistas, quien debe explicar estas cuentas, cómo están hechas y por qué.