Determinación para poder dar el salto y competir con los poderosos

Fue lo que le faltó al Valencia de Marcelino en el pasado, tan solo se dio la talla en la final de copa y el equipo fue demasiado temeroso y conformista

Jose Hernández | 08 OCT. 2019 | 07:48
Valencia CF

El Valencia de Celades todavía se encuentra en fase de construcción, las primeras semanas han sido muy duras por la carga de partidos y el equipo ha podido entrenar muy poco con el nuevo técnico. Celades se ha mostrado prudente en rueda de prensa pero valiente en su trabajo, ha tomado decisiones arriesgadas y ha dejado claro que no le temblará el pulso a la hora de elegir a los jugadores que deben actuar. Para él no existen jerarquías, todo lo contrario que para Marcelino. El trabajo del asturiano fue bueno, cumplió y devolvió la gloria de un título, pero haciendo un cómputo general de su paso por el club tampoco podemos definirlo como brillante o de matrícula de honor. Su mensaje conformista llegó a calar en el equipo y el Valencia siempre fue un equipo muy temeroso ante los equipos más poderosos. La única vía para poder acercarse a ellos es competirles al máximo pero con la convicción máxima de que se les puede derrotar. Tal y como decía el lema de la final de Sevilla: "soñar que no tenemos techo".

A la hora de la verdad Marcelino se equivocó muchas veces en su concepcción de lo que era el Valencia. Este verano sin ir más lejos llegó a afirmar que su equipo había tocado techo, un mensaje demasiado modesto y podríamos decir que decepcionante. Al Valencia hay que exigirle objetivos razonables, y uno de ellos es el de acercarse a Real Madrid, Barcelona y Atlético, además de dar pasos en la Champions. Solo con confianza y determinación además de fútbol, se podrá mejorar. Plantilla y materia prima existe.