Gonçalo Guedes debe dar el paso para ser la estrella del Valencia

La gran preocupación del verano en el Valencia es el estado de juego, que no de forma, de Gonçalo Guedes. El extremo portugués, que terminó muy bien el año y que al equipo le dio todo y más (aunque nos debe a todos y a nuestra salud cardiaca un gol en una final después de lo de Sevilla), no ha tenido una pretemporada brillante en absoluto, y aunque ha tenido chispazos de la gran calidad que tiene, como por ejemplo en el Trofeo Naranja, se necesita que su continuidad en el juego sea mucho mayor de lo que hemos podido ver hasta ahora. Lo que se espera, y sobre todo se necesita, del fichaje más caro de la historia del club es más, mucho más. Y este verano ha sido por fin normal para él, pudiendo trabajar con todos sus compañeros desde el primer día y sin aparentes problemas físicos.

Durante los encuentros de preparación, hemos podido ver más suelto y más acertado a Denis Cheryshev, que es cierto que viene de una lesión y llega como un tiro porque no ha dejado de trabajar desde que cayó en Sevilla el pasado mes de abril, pero está claro que el ruso, teniendo que aportar mucho durante todo el curso, no debe ser el hombre titular en esa banda izquierda de ataque del Valencia. Sin estar bien, contra el Inter vimos cosas que Guedes sabe y puede hacer, y eso es un motivo para ser optimistas de cara al sábado a partir de las 19 horas, cuando llegue la Real Sociedad y “empiece lo bueno”.