Jorge Mendes y el Valencia como el parchís: mato una y cuento veinte

Jorge Mendes va a ser el niño que pague los platos rotos de todo lo que pase en el Valencia, o de lo que algunos digan a que va a pasar, o de lo que se supuestamente podría pasar. Y nos explicamos para no dejar lugar a más dudas: todo lo que se le se atribuye al súper agente luso en cuanto a entradas y salidas de jugadores, ¿estamos completamente seguros de que es así? ¿De verdad que todos los movimientos en los que se se vincula el nombre de Mendes se hacen de verdad y que siempre tiene al Valencia en el punto de mira? Más que nada porque si es cierto, el porcentaje de operaciones que termina cerrando sobre las que plantea, o supuestamente plantea, es simplemente ridículo pensando que el dueño de la entidad de Mestalla es su socio, su amigo y él mismo le hace de consejero para muchas cosas.

Pero hemos conseguido crear una atmósfera en la que de verdad nos creemos que Mendes en Dios todopoderoso, que saca y mete jugadores en el Valencia como quien se cambia de camisa, y eso es evidente que no ocurre. ¿La crisis de Singapur? A mi que me la expliquen, porque dos semanas después sigue sin estar nada clara, ya que las operaciones que lleva en marcha el club son las mismas. ¿Cómo es posible que sean las mismas si se supone que Lim no quería hacer ninguna porque Mendes le había dicho que hiciera otras? ¿Qué locura es esta? Pero si hay quien pague los platos rotos, siempre es mejor.