"El aficionado del Valencia tiene derecho a opinar que está todo mal"

La parte maravillosa del fútbol es poder discutir sobre todo, aunque al final no se decida nada, pero al menos que se escuche al que sufre

Toni Hernández | 15 JUN. 2019 | 07:00
Valencianistas en Sevilla

"El aficionado del Valencia tiene derecho a opinar que está todo mal”. La discusión es con mi amigo Ramón, un valencianista de pro que siente el hierro como el que más, que no se pierde un partido en Mestalla nunca y que vive esto como si le fuera la vida. En definitiva, Ramón somos todos o casi todos en muchos momentos. Y a mi me encanta discutir con él, porque al final, la voz del aficionado es la que más suena aunque sea la que menos decide, de eso tampoco nos cabe duda a nadie. Estamos enzarzados ahora en si se deben pagar tantos o cuantos millones por Maxi Gómez, si es mejor o peor que Santi Mina, si puede garantizar 20 goles por temporada o no. Y aunque al final, como dice Ramón, “harán lo que quieran”, ese debate es delicioso.

Un club de fútbol, en este caso el Valencia, no puede actuar condicionado por lo que la grada o el entorno le diga, ya que en ese caso sería una marioneta y eso no podría acabar nunca bien. Pero cierto es que lo que más le gusta a la gente, al valencianista que ahora se debe renovar el pase sin renegar con la subida de precios, o el que tiene que comprarse la nueva camiseta Puma del equipo, es sentir que le escuchan, que le atienden, que le hacen caso aunque sólo sea a modo testimonial. Abrir ese espacio al aficionado sería una delicia, siempre en orden y con educación, porque a mi amigo Ramón, que sabes que te quiero y que nos debemos una final, lo que más le gustaría es poder explicarle a Mateo Alemany “su” Valencia, aunque luego el director general hiciera lo que quiera.