Aquel viaje de Mateo Alemany a Singapur que cambió la historia

Cuando el director general se marchó a Singapur para hablar con Peter Lim era para decirle que confirara en el trabajo... de todos

Toni Hernández | 17 MAY. 2019 | 07:00
Marcelino y Alemany

Mateo Alemany no salvó a Marcelino García Toral de ser cesado como entrenador del Valencia, sino que puso en valor el proyecto que él mismo y el técnico asturiano están forjando en el club. Y todo ello con el conocimiento y el consentimiento de Peter Lim, que si no hubiera tenida clara y definida la confianza en el director general de la entidad de Mestalla, habría optado por otra alternativa distinta a la de dar confianza y seguridad al trabajo que se estaba haciendo. Es más que posible que jamás en la historia del Valencia hayamos vivido algo semejante, pero es que nunca en la vida ha habido un señor que era el dueño del club, que exponía su patrimonio y que se había equivocado tomando decisiones que había tenido que pagar.

Mateo Alemany viajaba a Singapur a confirmarle al propietario que el trabajo no era malo, aunque los resultados eran nefastos, y que hay ocasiones en el mundo de fútbol que si esperas un poco, acabas consiguiendo lo que andas buscando. Varios meses después de aquel viaje que cambió la historia reciente del club, estamos a 90 minutos de ganar un partido y volver por segundo año consecutivo a la Champions (no pasa desde 2011), y a otros 90 de volver a ganar un título (algo que no ocurre desde 2008). Si aquel viaje no fue especial, es que quizá estamos olvidando el valor real de las cosas y lo que cuesta pelear con todos los que tiene más dinero. Y eso nos lo debemos hacer mirar.