El Atlético de Madrid no es el espejo del Valencia: nosotros somos el suyo

Los colchoneros son un modelo mejorado del que llegó a ser el mejor equipo del mundo en 2004, y eso no es sólo ganar títulos

Toni Hernández | 24 ABR. 2019 | 07:00
Atlético de Madrid - Valencia

El Atlético de Madrid no es el espejo no es el espejo en el que debe mirarse el Valencia: nosotros somos el suyo, ni más ni menos. No es falsa modestia ni nada por el estilo, simplemente es la constatación de un hecho, lo mismo que también es un axioma que ellos nos han mejorado con mucho incluso ganando menos y títulos que nosotros. ¿La diferencia? El año que viene jugarán por octava vez consecutiva la Champions League, así de simple. En el periodo dorado del Valencia, de 1999 hasta 2008, alargando por aquella de la Copa no celebrada, fueron 2 Ligas, 2 Copas del Rey, 1 Súpercopa de España, 1 UEFA y 1 Súpercopa de Europa. Y sí, el apéndice de siempre, las dos finales de Champions que perdimos en 2000 y 2001. Los colchoneros han ganado 1 Liga, 1 Copa, 3 Europa League y 3 Súpercopas de Europa, y también tienen “sus dos finales de Champions perdidas”. Todo ello en 9 años.

El modelo no es sólo ganar títulos. El Valencia de 1998 a 2004 optó por un perfil de entrenadores similar, por eso los jugadores importantes fueron en muchos casos los mismos, y una política deportiva basada en decisiones internas de gente con un plan. Vender no daba miedo porque el repuesto estaba definido, y en eso el genio de la lámpara se llamaba Javier Subirats, quien había sido el segundo de Suso Martínez antes. El siguiente al de Paterna fue otro que estuvo primero con él, Suso García Pitarch, curiosamente el hombre que empezó a armar el Atlético campeón. Es un buen día para recordarlo, como cualquier otro, porque esto siempre hay que tenerlo presente. Siempre.