“Estamos jodidos”: vale, pero eso no lleva al Valencia a la Champions

El equipo no puede desperdiciar ocasiones de oro por tener faltas de concentración o pensar que todo está resuelto antes de hora

Toni Hernández | 24 FEB. 2019 | 14:49
El Leganés celebra el empate

Estamos jodidos”, decía Cristiano Piccini después de que el Valencia se dejara dos puntos más en Leganés cuando ya casi tenía ganados 3. Y eso está muy bien, porque al final es como se siente el valencianismo, que empieza la semana más importante en más de una década con mala cara y sin ninguna necesidad, pero al final es que eso ahora mismo no te llega a valer ni de consuelo. Se te pone todo de cara, tienes la opción de sentenciar y no lo haces (eso forma parte del fútbol, que el rival también juega), y vas reculando, te echas hacia atrás, cedes terreno, dejas crecer al rival en el partido, y claro, al final tiene ocasiones para empatar y lo hace. Y no terminas perdiendo porque tienes a uno de los mejores porteros del mundo, con dedo roto o sin él. Y eso, con todo los respetos del mundo, no te puede pasar.

Está claro que el equipo está yendo a más, a mucho más, pero con él déficit de puntos que se tiene por la nefasta primera vuelta que se ha hecho no se pueden conceder estas cosas. El rival no es el Sevilla ni el Getafe ni ningún otro equipo, sino el propio Valencia y sus miedos y fantasmas. Quedan 13 jornadas de Liga, que hay que jugar una a una y no es algo de Perogrullo, y no es necesario no hacer cábalas ni tirar de matemáticas. Hay que ganar partidos sin parar, y sobre todo, dejar de regalar que no estamos para eso.