Un aplauso a todos los que quieren quemar la Falla del Valencia, pero fuerte

Peter Lim está estudiando echar a Marcelino García Toral como entrenador del Valencia, algo normal pensando cómo está el equipo. Y ya hay quien pone también a Mateo Alemany en el punto de mira. Y aquí hay un sector, y no hablo de los aficionados, que tienen derecho a pensar lo que les dé la gana, cuando les de la gana, que está deseando que haya sangre, mucha sangre. La excusa es Marcelino, que se lo está ganando a pulso con los resultados, pero sobre todo con él discurso sin demasiado sentido y excesivamente llorón que está teniendo. Pero el objetivo sigue siendo el mismo, Peter Lim, y como ahora mismo, este curso, no se le puede poner nada en cuestión al dueño más allá de confirmar de forma absoluta en la gente que se llevaba todos los aplausos el año pasado, hay que intentar darle la vuelta y poder cargar contra él. Contra Meriton. Contra la propiedad.

Marcelino es parte del problema, y esta vez lo digo yo, no él, y si hubiera un mínimo de sentido común, el asturiano debería acabar el año, y el 1 de julio ya veremos cómo están las cosas. Pero hay ganas de sangre, hay sed de esta líquido y denso elemento, porque ese camino conduce a donde algunos quieren ir. Y ahora montaremos el circo de Voro, y el de “no hay paciencia”, y los que mataron a Lim en 2015 por echar a Nuno cuando no tocaba hoy callarán. Ahora NO toca echar a Marcelino, lo mismo que no se puede poner en tela de juicio a Mateo Alemany. Estamos perdiendo el juicio, y eso nos condenará como club.