La sangre de Mateo Alemany: me representa

Como aficionado del Valencia, Mateo Alemany me representa. Si, lo escribo como aficionado, porque primero surgió el sentimiento y luego la profesión, y también he estado mucho tiempo y muchas veces en la posición del actual director general del club. Un tipo que sabe lo que se juega la entidad, y él mismo, que tiene un grado de compromiso absoluto con el Valencia por todo, que está peleando todos los días contra muchos obstáculos para que esta entidad siga con las mejores de la Liga y de Europa, y que ve cómo las cosas no van en el verde, cómo los árbitros no ayudan, cómo se puede ir todo por la borda después de mucho trabajo. Cuando uno está en un palco y se levanta totalmente erguido y como una exhalación, mano al aire y protestando, es que tiene muy claro dónde está.

A mi eso de las formas y el protocolo, me van a perdonar los pulcros a los que gusta ir al teatro, son excusas de mal pagador. Si tu insultas al rival o le faltas al respeto en la zona noble del estadio, te vas a la calla, pero si vives esto de esa forma, si tienes es identificación y esa responsabilidad, lo que se haga, siempre dentro de un orden, está más que justificado. Alemany me presenta, como valencianista y como gestor, porque a un profesional se le piden resultados y también, que muchas condena en más ocasiones que las derrotas. Que siga trabajando de este modo, en todas las parcelas del club, que siga creciendo, y que lo siga sintiendo de ese modo.