Ver a Peter Lim como enemigo en Valencia es equivocarse

Peter Lim es el dueño del Valencia, no el enemigo. No hace todas las cosas ni delega tampoco siempre en las perdonas correctas, pero el club paga sus deudas, arma plantillas competitivas, que suelen salen mejor o peor, está uno de cada dos años en Champions League (conforme a la media histórica), y él y sólo él, y en este punto sé que hay mucha gente que se cabrea pero no tiene razón, fue quien pagó a Bankia más de 90 millones de euros por las acciones de la vieja Fundación del club y tuvo “castaña” para quedarse con la entidad. Que se nos meta a todos en la cabeza que el sentimiento siempre será nuestro, pero la mercantil es de Meriton, que la gestiona como entiende, y no puede ser que sean buenos cuando se gana y malos cuando se pierde, cuando actúan siempre igual.

El año pasado el entorno callaba, nadie decía nada, una balsa de aceite. Marcelino era un entrenador TOP y Mateo Alemany lo mejor que había hecho Lim desde que está aquí. Que no fuera al campo daba igual, que Murthy metiera la pata daba igual, que su hija hablara en redes daba igual, que el Nuevo Mestalla ni estuviera en marcha daba igual (menos, pero daba igual). Todos callados y aplaudiendo. El dueño era el mismo que hoy, y el mismo que los dos cursos anteriores, esos del desastre y la vergüenza. Lo que queda claro es que hay muchas cuentas pendientes, muchas, mucha inquina y mala baba guardada, que sólo sale cuando el mar es propicio, y eso no es bueno…