Peter Lim tiene que ser ejecutivo en el Valencia, y rápido

La situación no puede ser peor después de los primeros cuatro meses de competición, y con el dueño en la ciudad, las cosas deben cambiar de forma radical

Toni Hernández | 10 DIC. 2018 | 12:23
Marcelino García Toral

Peter Lim tiene que tomar de nuevo las riendas del Valencia y dejárselas a Mateo Alemany en todos los niveles, arreglar este estado de crisis absoluto en el que está el equipo por un lado y el club por otro, que son dos aspectos mucho más distintos de lo que se pueda imaginar, y cortar esta sangría que nunca es bienvenida, pero que encima llega en el año del Centenario, en el que se tenían puestas muchas esperanzas de todo tipo. Al fina del año pasado se apretó a Lim de forma importante, diciéndole que había que dar un salto, que con lo que había no se podía competir con Madrid, Barcelona o Atlético de Madrid, que había que mejorar. Tragó y firmó, invirtió y no vendió, y ahora todo es un caos.

Murthy tiene soliviantado al entorno del valencianismo con discursos que no tienen sentido y con tuits que sólo tiran más leña al fuego, cuando él debería ser bombero y no pirómano. Marcelino se ve superado y mandando mensajes que no debe, ese manido “soy el máximo culpable pero no el único responsable”, que es como tirar una granada sin la anilla dentro del vestuario y de las oficinas deportivas. Que se reúna con todo el mundo está bien, que les oiga puede estar mejor, pero toca ser ejecutivos, porque no se puede marchar de aquí sin poner remedio a muchas que no están bien. Algunas se aguantaban por la inercia positiva del balón, pero otras ni así. Y ahora todo son fuegos de nuevo cuando no tendría que haber ninguno.