Los milagros de Marcelino en el Valencia

Los milagros de Marcelino García Toral en el Valencia han sido una especie de máxima desde que el técnico asturiano llegó al club hace año y medio. A jugadores que se quedaron en la entidad de las temporadas anteriores, esas en las que se llegó a pelear por no bajar a Segunda División, les lavó la cara y les limpió el cerebro, y de futbolistas que no tenían presente y mucho menos futuro en la entidad, ha llegado a hacer hasta internacionales absolutos. Los casos de Garay, totalmente recuperado, Gayà, uno de los mejores laterales zurdos de Europa, Dani Parejo, por fin un tipo con carácter y galones, y sobre todo, los de Simone Zaza, Rodrigo Moreno y Santi Mina, que la rompieron con Marcelino el curso pasado, son los que mejor pueden ilustrar estos “milagros”, que igual no lo son tanto, pero que sí son un hecho diferencial importante, y más ahora.

Y es que ahora mismo le toca hacerlos con Cristiano Piccini, un lateral de 10 millones que parece que no tiene sitio en este equipo, Gonçalo Guedes, que necesita una dosis de confianza y calma como el respirar, de nuevo con Rodrigo Moreno, que parece estar muy lejos de esa versión que nos entusiasmó a todos el año pasado, y especialmente con Kevin Gameiro y Michy Batshuayi, que están a años luz de rendir a un mínimo de lo que se espera de ellos, y que apenas si suman 3 goles entre los 2… uno menos que los que ha metido Santi Mina, y eso que el asturiano estaba para ser el delantero que fuera complemento. A Marcelino le toca sacar la varita mágica… y rápido.