¿A Guedes no hay protegerle? ¿Hasta que no se lo carguen?

Lo que le pasa a Gonçalo Guedes con la camiseta del Valencia es un auténtica vergüenza. Al extremo luso le cazan y le cazan, le pegan y le pegan, y como siempre se levante, como no protesta, como no no acaba ni poniendo mala cara, parece que es como si nunca pasara nada. Y cuando a alguien le dan tanta cera partido tras partido, lo normal es que acabe lesionado, como le pasó contra el Barcelona (qué curioso hubiera sido si en lugar de a Guedes le pasa a Messi en el mismo escenario). Hemos escuchado a la prensa de los dos que se creen siempre más grandes y “más” que los demás decir que hay que proteger a sus estrellas, a las suyas, que no al fútbol, que eso es mucho menos importante. Y como tantas veces, los demás es como si fuéramos el relleno necesario de esta Liga.

Ver a Guedes tener que marcharse en el minuto 7 de un gran partido porque recibe infinitas patadas por partido es duro, duele, molesta, y si lo piensas fríamente, te puede dar hasta asco. Por la impotencia que te genera el que a algunos futbolistas no se les pueda ni rozas dependiendo de la camiseta que lleven. Insistimos, el fútbol da lo mismo, importan ellos. Pues Guedes ha costado más de 40 millones de euros y es uno de los mejores jugadores del mundo, y sobre todo, juega en el Valencia. Ya está bien de que esto sea una broma, de que sólo valgan las reglas para dos.