Un gran Valencia, un enorme Valencia: nuestro Valencia

El equipo se pone su mejor traje, el de gala, el de las grandes ocasiones que merece la mejor competición de clubes del mundo

Redactor Jefe | 02 OCT. 2018 | 23:00
Gonçalo Guedes

Los grandes equipos juegan los grandes partidos como lo que son, grandes. Y el Valencia se puso ese traje, porque esto es la Champions League y sólo se puede ir así, no hay otro camino. Ir al Old Trafford y no ir con todo y a muerte significa morder el polvo sin remisión. Bien posicionados, sin miedo, con cambio de cromos más que de sistema, dando entrada a Coquelin por Soler (algo que merece otro análisis al margen). Llegando y no dejando llegar. La primera media hora del encuentro no podía ser mejor, si acaso haber conseguido hacer gol en alguna de las llegadas claras de Guedes, un dolor de cabeza para la zaga del United. El arbitraje, eso sí, empezaba a ser cantoso, muy cantoso, estricto para los de fuera, permisivo para los de casa, y eso jamás es bueno, jamás.

La segunda mitad empezó con los mismo derroteros. Un Valencia concedía poco y llegaba mucho, pero sin rematar la faena ante un equipo que otra cosa no, pero defiende de una forma extraordinaria, y hacerle daño del bueno no es nada fácil. Pero el encuentro estaba vivo, se estaba muy dentro del partido, y la pinta era de cocinarse todo a fuego lento. Los de casa empezaban a llegar faltando 20 minutos, algo normal, pero el Valencia aguantaba y salía. Con menos peligro que en la primera parte, pero salía. Un empate final que puede saber a poco, pero que hace que el equipo esté vivo, muy vivo, y dependa de sí mismo para pasar la fase de grupos.