Un mes para olvidar

Ni el más pesimista de los valencianistas esperaba que el equipo ofreciera un nivel tan pobre en el primer mes de competición, el Valencia se encuentra en la parte baja de la tabla y además se ha complicado la vida en la Champions League. No se consigue ganar y ya se suman tres partidos sin ver portería, se terminan las excusas y el calendario no ofrece tregua ya que el miércoles visitará Mestalla el Celta. El discurso de Marcelino es sereno y el técnico sigue confiando en sus jugadores, pero son muy pocos los aspectos positivos que se pueden recalcar.

Ante el Villarreal el equipo tiró de casta con diez hombres para rascar un punto, pero es un bagaje muy pequeño teniendo en cuenta las urgencias que tiene el Valencia. La defensa estuvo bien pero nuevamente faltó fluidez en la creación, los fichajes siguen sin aparecer y Parejo está muy lejos de su mejor versión. Lo peor de todo es que no hay que razones que inviten al optimismo y las soluciones no llegan, sin Rodrigo en el campo el resto de delanteros tampoco fueron capaces de ver portería, y Guedes necesita enchufarse y demostrar que el Valencia no se ha equivocado con su fichaje.

Los equipos rivales han cogido la matrícula a un Valencia que es demasiado previsible y no hace daño. Cinco partidos de liga y cuatro empates que dejan al Valencia cerca del descenso tras un mes de competición, hay que lograr la primera victoria y apagar la ansiedad cuanto antes.