Nervios e inseguridad antes de recibir a la Juventus

El Valencia volvió a tropezar y ya son cuatro encuentros sin conocer la victoria, el equipo se deja puntos y sobre todo transmite demasiada inseguridad. Ayer se tardaron casi 40 minutos en dar señales de vida en el partido y ofrecer una tímida sensación de peligro e iniciativa, hasta entonces solo acciones esporádicas como el inocente disparo de Gameiro. La primera mitad de los de Marcelino fue preocupante y nuevamente se vieron demasiados puntos de desconexión táctica entre las diferentes líneas. En la primera media hora de juego el Valencia renunció a la posesión pero tampoco estuvo acertado en la rápida salida tras recuperación, algo que la pasada campaña fue una de las grandes armas para crear peligro a los rivales.

El Valencia llegaba al partido con la ansiedad de no haber conseguido ninguna victoria y el peso de no haber sido capaz de ponerse por delante en ningún encuentro. A diferencia de lo visto la pasada temporada, a los jugadores les cuesta demasiado reponerse a los contratiempos, la lesión de Kondogbia descolocó al equipo y fue otra losa que mantuvo a los valencianistas lejos del encuentro durante algunos minutos. Faltan muchos ajustes por realizar y el calendario no ofrece tregua, La Juventus será la primera piedra de toque en la Champions League, un partido en el que el Valencia necesita orden y concentración para poder sacar un resultado positivo, de momento se está lejos del nivel exigible a una de las plantillas más caras de la historia del club, los de Marcelino regalan demasiados minutos al rival.